¿Cuál es el límite de mediciones de distancia usando variables cefeidas?

Teóricamente, no hay límite para usar el método de las Variables Cefeidas (CV) para medir la distancia astronómica.

Sin embargo, solo hay dos formas confiables y verificadas para calcular la lejanía a través de distancias astronómicas: radar y triangulación. El radar (hacer rebotar una señal de microondas de un objeto y analizar el eco) está restringido en la práctica a los objetos dentro del Sistema Solar. Incluso si un transmisor de radio que se desarrollaron fue lo suficientemente potente y lo suficientemente precisa para llegar a las estrellas que están a sólo 50 años luz de distancia, el tiempo de respuesta sería de cien años.

Triangulación conocido como paralaje, es una manera probada y fiable de medir la distancia. La trigonometría nos da los medios para calcular la distancia perpendicular desde la base de un triángulo isósceles con el vértice, dada la longitud de la línea de base y el tamaño de los ángulos en cada extremo. La precisión de la triangulación depende de manera crítica de la longitud de la línea de base en proporción a la distancia al objetivo, a fin de evitar demasiado estrecho un ángulo en el vértice. El diámetro de la órbita de la Tierra alrededor del Sol ofrece una línea de base que es de 2 unidades astronómicas de largo, dando un límite exterior de la medición exacta de 300 años luz. El satélite Hipparcos está impulsando actualmente que a LY 1000.

Nada más se basa en la idea de que podemos identificar los llamados candelas estándar, que son clases de objetos reconocibles que todos tienen el mismo nivel de brillo intrínseco.

Existen dos problemas para cualquier clase de vela estándar. El principal es la calibración, en otras palabras, determinar con precisión la magnitud absoluta de la vela. El segundo problema es establecer qué objetos califica para ser miembro de una clase particular de velas.

Una de las herramientas estándar utilizadas por los astrónomos para medir la distancia fuera de nuestra galaxia está dada por la tasa de oscilación de estrellas conocidas como Cefeidas variables. Existe una correlación definitiva entre el tiempo que tarda una estrella variable en fluctuar y qué tan brillante parece ser. Desafortunadamente, la instrumentación mejorada ha demostrado que los CV no son una clase de velas estándar. Supernovas (explosiones de estrellas) también se invoca como candelas estándar para medir distancias considerablemente mayores que las que al parecer dado por el periodo-luminosidad de las estrellas variables. Desde entonces, han sido expuestos como tener brillo intrínseco no estándar.

En 1928, el astrónomo Edwin Hubble encontró lo que inicialmente se pensó era una relación sistemática entre el corrimiento al rojo de una muestra de 23 galaxias del Grupo Local, y su luminosidad aparente. La idea era que las galaxias fuera de nuestra Vía Láctea eran candelas estándar, y que su luminosidad aparente era proporcional a lo lejos que estaban. También se ha demostrado que las galaxias tienen un brillo enormemente variable y son inútiles como velas estándar.

En resumen, la realidad es que, aparte de las estrellas que se encuentran a menos de 1000 años luz de radio de la Tierra, la astrofísica no tiene una medida de distancia precisa y verificable basada en un valor de referencia conocido, con la terrible implicación para la cosmología de que en 2016, la estructura , la distancia y la edad del Universo es imposible determinar con precisión o certeza.