Esto es difícil de contestar.
Respuesta corta: cero.
Las enfermedades genéticas son difíciles de curar, ya que requieren alterar la genética del paciente para “curar”. La mejor práctica es controlar la enfermedad, no curarla. Muchas personas que reciben tratamiento para muchas enfermedades genéticas aún pueden sucumbir a su enfermedad a tiempo. Actualmente, en los Estados Unidos, no hay productos disponibles que puedan alterar la genética de un paciente y, por lo tanto, “curar” la enfermedad. La FDA ha publicado recientemente pautas para los animales de ingeniería genética (animales genéticamente modificados). Será un proceso largo en términos de ética y seguridad antes de profundizar en la modificación de la genética del paciente.
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Además, asignar gloria a una fuente de financiación también es difícil. Las enfermedades son investigadas en la academia por un gran número de científicos que son financiados a través de varias fundaciones caritativas, subvenciones o inversiones privadas. Creo que sería difícil encontrar muchos ejemplos, si los hay, de una enfermedad (genética o de otro tipo) que se curó SOLAMENTE debido a donaciones de caridad.
Además, no todas las fundaciones caritativas se centran en financiar la investigación. Algunos, por ejemplo: Genetic Alliance UK, se centran en el cambio de políticas. ¡Esto puede ser incluso presionar para obtener más fondos! Esto significa que las organizaciones de caridad pueden beneficiar a los pacientes mucho antes de que ayuden a encontrar una cura.
