¿Hay algún animal, pájaro, bicho o reptil que no duerma en toda su vida?

El sueño es un término comparativo; en realidad, es un período de inactividad caracterizado por la reparación del cuerpo, la secreción de hormonas de crecimiento, la consolidación de la memoria a largo plazo, la relajación muscular, la percepción reducida de los estímulos ambientales y los sueños.

El investigador del sueño Matthew Wilson, del MIT, recientemente hizo un trabajo fascinante para soñar en particular. Grabó los cerebros de las ratas mientras corrían por un laberinto, notando la actividad mental producida. Más tarde, mientras las ratas dormían, vio la misma actividad, solo que más rápido y jugó en reversa, ¡como si la mente de la rata estuviera rebobinando una grabación VHS de la carrera por el laberinto! Soñar, afirma Wilson, es una forma de “limpieza mental”, donde el cerebro determina qué recuerdos debe conservar y qué desechar.

Pero muchos animales no tienen sistemas nerviosos bien desarrollados o sistemas inmunes complejos. Por ejemplo, las esponjas nunca duermen. La mayoría de los cnidarios también. ¿Por qué necesitarían hacerlo?
Entonces, parece que dormir es un efecto secundario necesario de poseer y mantener un cerebro.

Ahora pasamos a la segunda parte de la pregunta: las moscas del orden Ephemeroptera viven de unas pocas horas a unos pocos días como adultos dependiendo de la especie, y muchas especies viven aproximadamente un día después de la muda y la cría. El orden Ephemeroptera proviene de la palabra griega ephemeros, que literalmente significa “día completo” o “que dura un día”. Las moscas de mayo no pueden vivir más de unas pocas horas o días porque sus partes bucales y su sistema digestivo son vestigiales o no funcionales, lo que significa que nunca pueden comer y que mueren rápidamente de hambre una vez que gastan energía cuando son adultos.