¿Los objetos son reales según la mecánica cuántica?

La imagen que parece emerger de la mecánica cuántica es aquella en la que las partículas pequeñas pueden, literalmente, no tener un estado, ni siquiera una posición, hasta que se vean forzadas por algún tipo de experimento. Si tienen una posición definida, somos fundamentalmente incapaces de decir qué es, y nos vemos obligados a inventar teorías matemáticas bastante extrañas para explicar cómo realmente tienen una posición cuando parecen no serlo. Si ese es el caso, ¿son reales?

Podrías preguntar si la gravedad es real. La gravedad, como una fuerza que actúa entre los objetos que tienen masa, fue literalmente una invención de Isaac Newton. Ahora su interpretación de los hechos ha sido reemplazada científicamente por la relatividad, en la cual la gravedad se deforma en el espacio-tiempo. Antes de Newton, nadie usaba la palabra “gravedad” para referirse a la tendencia de los objetos a moverse “hacia abajo”. Pero ahora es parte del discurso cotidiano.

Como los efectos de la gravedad son reales, tendemos a decir que la gravedad es real, independientemente de si nuestra interpretación es correcta.

La situación es un poco más turbia que la mecánica cuántica, porque los objetos grandes parecen estar formados por objetos pequeños. Y, sin embargo, los objetos grandes parecen tener un estado definido y una posición definida.

Por lo tanto, falta algo de nuestro entendimiento. Algunos llegan a la conclusión de que quizás todo el universo físico existe en nuestras mentes; es real en el sentido de que no podemos simplemente atravesar paredes y no es solo un sueño, sino que es irreal en el sentido de que podría no existir si no existiéramos.

Esta sería una conclusión muy radical desde el punto de vista científico, y no tenemos ninguna teoría científica de cómo funcionaría exactamente en detalle. Si alguien pudiera inventar uno, podríamos incluirlo en la mezcla con las otras interpretaciones exactas de la mecánica cuántica, y continuar buscando una manera de decidir entre ellos. Algunas de las otras interpretaciones ya son muy extrañas, por lo que esto solo sería un paso adicional hacia la extrañeza.

No. Solo los conceptos erróneos populares de la mecánica cuántica sugieren tales cosas. Sugiere que la naturaleza fundamental de las cosas es más extraña de lo que se podría pensar. Sin embargo, la incertidumbre asociada con algo lo suficientemente grande como para ser considerado un objeto es intrascendente.

No se puede obtener evidencia de que los objetos no son reales porque la evidencia solo se puede obtener mediante el uso de objetos, ya sean nuestras manos o contadores geiger. Por lo tanto, lo que obtenemos del uso de objetos siempre asumirá que los objetos existen (si no existieran, no los estaríamos usando).

La física cuántica dice muchas cosas sobre la realidad, como el principio de superposición o el principio de incertidumbre de Heisenberg, pero ninguno de ellos implica la inexistencia de objetos. Sin embargo, implican que algunas características de los objetos solo pueden conocerse cuando se miden, como el momento y la posición de una partícula, lo que de ninguna manera significa que no existan mientras no se miden, como a muchos les gusta inferir.