El problema con la terraformación de Júpiter es que probablemente no haya Terra (material rocoso) para transformar.
Júpiter es 74% de hidrógeno y 25% de helio con 1% de otros gases y elementos. La composición de hidrógeno varía de forma gaseosa en la atmósfera a hidrógeno metálico a medida que aumenta la presión de la superficie al núcleo. En Júpiter no tendrás tierra firme para pararte. Terraformar, por lo tanto, es una gran iniciativa y probablemente no valga la pena. Existen mejores posibilidades para terraformar las lunas de Júpiter que tienen amplios recursos y grandes cantidades de agua.
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Una posibilidad podría ser construir hábitats flotantes en Júpiter. La fuerte gravedad de Júpiter podría ser un problema, que es imposible para los humanos sobrevivir. Además, Júpiter tiene vientos fuertes, y el hidrógeno que contiene la atmósfera reaccionaría peligrosamente con el oxígeno, si ocurriera una fuga en la base. Por lo tanto, Júpiter no es realmente adecuado para hábitats humanos.