¿Cuál es la forma más fácil de medir el volumen de sangre?

Las mediciones de volumen de sangre han estado disponibles durante casi 60 años. La prueba a menudo requería de 4 a 8 horas para realizarse y era muy difícil de realizar con precisión. Debido a esto, rara vez se obtuvieron mediciones de volumen de sangre. En situaciones en las que se indica el conocimiento del volumen de sangre circulante, comúnmente se realizan varias pruebas de poder. Estos incluyen pruebas de hematocrito o hemoglobina, que solo miden la proporción de glóbulos rojos a plasma. El cateterismo de la arteria pulmonar puede usarse para ayudar a guiar las decisiones de manejo cardiovascular y de fluidos, pero el método es invasivo y no refleja específicamente el volumen sanguíneo circulante. Las variables hemodinámicas, como la presión arterial, el índice cardíaco y la presión de cuña pulmonar, proporcionan información sobre la circulación cardiovascular y la perfusión, pero no diferencian entre los efectos del volumen total versus el tono o la respuesta vasomotora.

El BVA-100 proporciona una medición precisa y directa del volumen de sangre circulante en aproximadamente 1,5 horas. Se ha encontrado que el procedimiento es viable en un entorno clínico. Además, el software del instrumento calcula un volumen de sangre normal para cada paciente en función de la altura y el peso de ese paciente, y compara el volumen de sangre medido con la norma del paciente. Esto puede proporcionar información invaluable que no puede obtenerse de otro modo y puede ser útil en las decisiones de manejo cardiovascular y de fluidos, así como en el diagnóstico de muchos trastornos hemodinámicos y cardiovasculares.