¿Puedo mover una montaña si acelero una pequeña partícula de modo que ejerza suficiente fuerza?

Respuesta corta: no

Respuesta larga:

Para “mover” la montaña, se deben superar muchas limitaciones prácticas, incluso si hay suficiente impulso disponible. El más difícil de estos es la no rigidez. Asumiendo que su partícula es macroscópica y gana suficiente impulso para mover la montaña, no “empujará” la montaña sino que la atravesará como una bala. Si se trata de una partícula subatómica, colisiona con las moléculas de la montaña, causando excitaciones, desexcitaciones y haciendo que la montaña brille en un resplandor.

La siguiente restricción es el calor de impacto. Un impulso tan alto que de repente se transfiere por completo da como resultado una gran pérdida de energía cinética que calienta la montaña para que se derrita. Entonces no habrá montaña para moverse.

Si supone que una montaña perfectamente rígida en una tierra perfectamente rígida es golpeada por una bola perfectamente rígida, habrá un cambio en el movimiento de toda la tierra si el impulso impartido es muy alto. Pero mover la montaña relativamente con respecto a la superficie de la tierra sigue siendo imposible.

Entonces, en conclusión, simplemente no puedes, ni siquiera te molestes en intentarlo 🙂

Tu pregunta no está completa. Basado en lo que creo que has dicho, sí. Pero eso sería solo en un lugar donde no hay otras fuerzas externas que actúen en la montaña. Si aplicas fuerza a una montaña, la fuerza neta decide el resultado del evento. En la tierra, o en cualquier otro planeta, la montaña se mantiene en el suelo por fuerzas internas, obviamente. Además, la reacción normal es bastante alta, por lo que la fuerza de fricción que actúa sobre la montaña sería enorme. Entonces, lo que estoy tratando de decir es que si intentas hacer lo que quieres hacer en un entorno libre de gravedad, entonces puedes moverlo. Pero en una situación en la que tiene fuerzas externas que se oponen al movimiento deseado, no se moverá ya que F (neto) = Ma. No F = Ma. Por pequeña que sea la fuerza NETA, la montaña aún se moverá.