Segunda Guerra Mundial: ¿Cuántos científicos del Proyecto Manhattan fueron retenidos como alienígenas enemigos, aunque sea brevemente?

Klaus Fuchs fue internado en 1939 en Gran Bretaña en la Isla de Man y luego fue transferido a Canadá antes de ser liberado en 1941. Después de su liberación, Fuchs regresó a Gran Bretaña y trabajó con Rudolph Peierls. Fuchs fue a Columbia con Peierls en 1943 y se unió a la División Teórica en Los Alamos en 1944.

Rudolph Peierls y Otto Frisch no fueron internados, sino que se encontraron en una situación anómala. Después de redactar los famosos memorandos de Frisch-Peierls que calculaban cuánto uranio enriquecido se necesitaría para construir una bomba atómica, cómo podría construirse un atómico y cómo enriquecerlo, Frisch y Peierls fueron excluidos de continuar su investigación o incluso de discutirla. Después de un intenso cabildeo por parte de científicos británicos, a Frisch y Peierls se les permitió reanudar su trabajo.

Gran Bretaña no internó a todos los alienígenas enemigos al estallar la guerra y ni siquiera exigió que todos los alienígenas enemigos se registraran con las autoridades hasta 1940.

Otto Frisch se había mudado a Gran Bretaña desde 1933 con la adhesión de Hitler, pero tomó un puesto de investigación en Dinamarca para trabajar con Nils Bohr. Frisch regresó a Gran Bretaña justo antes de que estallara la guerra y optó por quedarse en Gran Bretaña.

Rudolph Peierls había estado trabajando en Gran Bretaña desde 1933, cuando decidió emigrar cuando Hitler tomó el poder.

En general, la partida de talentosos científicos alemanes tuvo lugar mucho antes de la guerra. Los emigrados alemanes que optaron por Gran Bretaña y los Estados Unidos tuvieron tiempo de establecerse, especialmente aquellos que fueron ayudados por los grupos ad hoc que surgieron para colocar académicos alemanes en instituciones fuera de Alemania, y no fueron arrojados automáticamente a campos de internamiento. Los funcionarios de seguridad del Proyecto Manhattan no se sentían del todo cómodos con los científicos emigrantes y los sometieron a un mayor escrutinio, pero no se les prohibió desempeñar papeles clave en el proyecto.