¿Qué hace crecer a los árboles?

En los humanos y otros animales, el crecimiento puede ocurrir en la mayoría de las partes del cuerpo. A medida que maduramos, nuestros huesos, piel y músculos aumentan de tamaño. Los árboles no crecen así. Los árboles crecen produciendo nuevas células en un número muy limitado de lugares. Estos lugares de división celular se denominan meristemos. Los meristemos son zonas de intensa actividad. Son donde se forman todas las células nuevas y donde se expanden.

Los árboles crecen en altura como resultado de meristemos que se encuentran en las puntas de sus ramas. Estos meristemos se llaman meristemos apicales. Las raíces también se expanden a través del suelo al crecer en sus puntas como resultado de meristemos apicales. Todos los brotes que ves en un árbol contienen meristemos apicales. El crecimiento del diámetro del tronco se produce como resultado de otro meristemo ya mencionado llamado cambium vascular. El cambium vascular produce nuevos xilemas y floemas cada año y, como resultado, el tronco, las ramas y las raíces continúan aumentando de diámetro. ¿Alguna vez has visto un alambrado o un tablero convertido en un árbol?
Ese es el resultado del cambium vascular. El alambre o tablero de la cerca no se eleva en el aire porque el crecimiento en altura no se produce fuera del suelo, solo ocurre desde las puntas de las ramas

Los árboles necesitan comida para crecer, pero no puedes comprarles comida. Producen sus propios alimentos a partir de la luz solar, el agua, el dióxido de carbono y los nutrientes del suelo, y este proceso se llama fotosíntesis.

La fotosíntesis es un proceso utilizado por todas las plantas (plantas de interior, plantas de exterior) y otros organismos para convertir la energía de la luz en energía química que luego puede liberarse para alimentar las actividades de los organismos. Esta energía química se almacena en moléculas de carbohidratos, como azúcares, que se sintetizan a partir de dióxido de carbono y agua. En la mayoría de los casos, el oxígeno también se libera como producto de desecho.

Los árboles crecen con el agua, la luz solar y el dióxido de carbono. Lleva a cabo un proceso llamado “Fotosíntesis” donde se crea energía en forma de glucosa que se pasa a las raíces y de las raíces a las otras partes del árbol.