En la antigüedad, las personas aún podían viajar distancias significativas y, a través de observaciones básicas del sol, la luna y las estrellas, podían determinar la consistencia de los años y el día más largo de cada año.
Se notó que en el día más largo en un área (creo que en algún lugar de Egipto) no había sombra ya que el sol estaba directamente sobre la cabeza, sin embargo, en Grecia había una sombra ese día.
Se ideó un experimento utilizando su conocimiento de la geometría, midiendo la longitud de las sombras proyectadas en dos ubicaciones y comparándolas, es posible calcular el tamaño del planeta. Estos cálculos antiguos tenían solo un 2% de descuento en las medidas modernas.
- ¿Cómo medimos la temperatura en el núcleo de la tierra?
- ¿Por qué marcamos el comienzo de las estaciones en la mitad de la temporada real?
- ¿Cuánto más brilla la Tierra que la Luna?
- ¿Por qué la próxima 'Luna llena de fresas' no sucederá en 46 años?
- Si la Tierra no es redonda, ¿por qué tiene un radio?
En cuanto a que la Tierra no es estacionaria, se demostró que era falsa con el descubrimiento del heliocentrismo. El hecho de que los planetas orbitan alrededor del Sol y no de la Tierra requiere que la Tierra se mueva junto con los otros planetas.
El modelo heliocéntrico se propuso como una explicación del hecho de que ciertas estrellas (en realidad planetas) parecían a veces retroceder en el cielo nocturno en relación con el resto. El cálculo y la observación posteriores demostraron que esta es la explicación más razonable para todos los fenómenos observados.