La UE avanza aún más hacia la producción nacional de tecnología verde

La UE avanza hacia una mayor producción nacional de tecnología verde

En medio de una carrera mundial por la soberanía tecnológica verde, el Parlamento Europeo aprobó el martes la Ley de Industria Net-Zero (NZIA) – un proyecto de ley destinado a impulsar la producción manufacturera de la UE en las tecnologías necesarias para la descarbonización.

Inicialmente propuesta por la Comisión en marzo, la NZIA establece un par de objetivos ambiciosos. En primer lugar, busca asegurar que al menos el 40% de la demanda de tecnología cero-neto del bloque sea producida internamente para 2030. En segundo lugar, tiene como objetivo capturar el 25% de la cuota de mercado mundial de estas tecnologías.

Para lograr esto, la ley propone varias acciones clave para impulsar la inversión en la producción doméstica de tecnologías estratégicas, que abarcan desde energía solar y eólica hasta captura de carbono, almacenamiento de baterías e hidrógeno renovable (Hidrógeno).

Las medidas incluyen la aceleración de permisos, una plataforma designada para permitir la cooperación entre la Comisión y los estados miembros, el aumento de trabajadores cualificados y cajas de arena regulatorias que los estados miembros pueden utilizar para probar tecnologías innovadoras.

Con su voto del martes, los eurodiputados sugirieron la expansión del alcance de la legislación inicial para incluir toda la cadena de suministro de tecnologías cero-neto, incluyendo componentes, materiales y maquinaria de producción. También propusieron una lista más completa de tecnologías y añadieron la fisión nuclear, las tecnologías de fusión y los combustibles de aviación sostenibles (SAFs).

“Sin estos pasos para reducir la carga administrativa, acelerar los procesos e incrementar la inversión pública en nuestra industria e innovación, Europa se enfrentaría a la descarbonización a través de la desindustrialización. Esta propuesta muestra que podemos prevenir esto”, dijo el eurodiputado Christian Ehler, líder del proyecto.

Para financiar este proyecto, la Unión aprovechará el apoyo de programas de financiación como InvestEU, el Fondo de Innovación y el próximo Fondo de Soberanía Europea. Aún no se ha revelado un plan de presupuesto general, pero el bloque deberá competir con la Ley de Reducción de la Inflación de Estados Unidos (IRA) – un paquete de subsidios de $369 mil millones para tecnología verde de fabricación norteamericana que ya ha levantado preocupaciones sobre su potencial para atraer a empresas de la UE al otro lado del Atlántico.

Mientras tanto, China representa el 90% de las inversiones globales en instalaciones de fabricación de tecnología cero-neto, y el bloque aún depende en gran medida de Beijing para productos estratégicos como componentes fotovoltaicos, vehículos eléctricos y baterías.

Queda por ver si la NZIA – sujeta a la aprobación del Consejo – logrará revertir esta tendencia y impulsar la competitividad y la independencia de la UE en el sector.