La arquitectura tiene muchos nichos, pero dos se destacan en lados opuestos del espectro:
- Fenomenología
- Ciencia de la construcción
El primero involucra los resultados intangibles y a menudo cualitativos de la arquitectura, que es pesada en diseño sensorial y procesos orgánicos. Estos suelen ser específicos del usuario y difíciles de repetir fuera de contexto. Tomando claves de la filosofía, tanto los críticos como los arquitectos se preocupan principalmente por la atmósfera, la respuesta emocional y el estado de ánimo.
Este último involucra un enfoque más prescrito y típicamente cuantitativo de la arquitectura, que se centra en el rendimiento de la construcción y los procesos científicos. Se trata de un diseño basado en sistemas, hecho posible a través de elementos repetibles. Siguiendo las indicaciones de Ciencia e Ingeniería, los propietarios y arquitectos se preocupan principalmente por la sostenibilidad ambiental, la resistencia de los materiales y la eficiencia.
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Ambos enfoques de arquitectura ofrecen ventajas y desventajas, lo que hace que muchos arquitectos usen ambos enfoques simultáneamente durante la fase de diseño.
Hay algunos dentro de la industria que buscan cerrar las brechas entre la Neurociencia y la Arquitectura, esencialmente cuantificando los elementos calificables que hacen que un edificio sea excelente. Esta fusión de subjetividad y objetividad podría desangrarse en las ciencias de la construcción y los procesos de construcción para conectar emocionalmente a las personas con los edificios que funcionan a un alto nivel.
Nos merecemos ambos y espero ver que se convierta en el estándar en mi vida.