Química: ¿por qué brilla el tritio?

El tritio, un isótopo de hidrógeno con 2 neutrones y un protón, es un núcleo inestable. Se desintegra emitiendo un electrón y un neutrino electrónico (desintegración beta), formando un núcleo de Helio-3. El electon neutrino no es importante en este contexto, el electrón sí lo es. Cuando el electrón emitido por un átomo de tritio golpea un fósforo, el fósforo absorbe la energía y la emite nuevamente como luz visible.

Por lo tanto, un tubo, recubierto por dentro con un material fosforescente y lleno de tritio, brillará, ya que el tritio se descompone en helio-3 y el material fosforescente absorbe los electrones y reemite la energía como luz. Dado que la vida media de Tritium es de más de 12 años, esto hace que esta fuente de luz sea útil para aplicaciones en las que se necesita una iluminación constante, no necesariamente brillante, durante un período prolongado, sin electricidad.

El tritio en realidad no brilla. El tritio, una forma pesada de hidrógeno, es radiactivo. Sometidos a un proceso conocido como desintegración beta, liberaciones de tritio y electrones y lo que es esencialmente helio energético. Estas especies energéticas golpean un recubrimiento, conocido como fósforo, y es este recubrimiento el que crea la luz que atribuyes al brillo. Por cierto, los fósforos se usan para hacer que las imágenes aparezcan en esos viejos televisores CRT (¡la diferencia es que la fuente de electrones era un tubo de rayos catódicos, no tritio)!