¿Cuáles son los mejores sistemas para proteger las heladas de un viñedo?

Hay dos tipos de congelamiento: advectivo (ventoso) y radiativo (que tiene la formación de una capa de inversión). Las heladas advectivas son muy difíciles de controlar, y los calentadores de viñedos suelen ser la única forma de intentar mitigar el daño. Pero los calentadores son costosos y requieren combustible, por lo que también evitan un riesgo ambiental. Las heladas radiativas, como las que usualmente tenemos en Napa, tienen una capa de inversión. Los calentadores también pueden funcionar para heladas radiactivas, pero tienen los mismos problemas de costos y preocupaciones ambientales y de almacenamiento. Con una capa de inversión, las máquinas eólicas pueden mezclar el aire más cálido en el aire más frío, y a menudo son una forma efectiva de controlar las heladas si se encienden lo suficientemente temprano y el aire frío y bajo no es demasiado frío. En 2008, las temperaturas en Napa alcanzaron los 22 grados F y las máquinas eólicas no fueron efectivas en muchos lugares. Los rociadores aéreos que congelan el agua en las vides y liberan calor latente son muy efectivos, pero requieren mucha agua disponible y la infraestructura (ya que la mayoría de los viñedos se riegan por goteo y no por riego por aspersión). Los rociadores también pueden ayudar a mitigar el daño por calor más tarde en el verano y el otoño.
Conocer las áreas bajas donde quedará atrapado el aire frío es esencial. Puede tener sentido orientar las hileras del viñedo para evitar o minimizar la exposición en estas áreas. Además, elija variedades de brotación tardía o variedades menos sensibles a las heladas al plantar.