Lamentablemente, aunque a todos nos encantaría que esas cosas sean ciertas, simplemente no lo son. Son fantasias.
Si fueran fantasías de ciencia ficción, serían interesantes (francamente, poco imaginativas). Pero el hecho de que haya personas que se hayan convencido de que estas son cosas reales en las que vale la pena dedicar su energía es, de hecho, bastante triste … es admirable que estas personas quieran, tanto, hacer posibles ciertas cosas. Y parece un desperdicio y una cosa triste que se hayan perdido en su deseo de encontrar un camino, de modo que se engañen haciéndose creer que son reales.
Hay una especie de patetismo sobre esto, aunque algo arruinado por la agresión con la que algunas de estas personas defenderán sus creencias. Recuerdo una historia en la que un padre se volvió loco por la muerte de un niño y se convenció de que el niño estaba realmente vivo. Es triste porque algo noble y admirable ha forzado a las personas a creer que no puede dar fruto.
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Me gustaría creer que alguien de alguna manera encontrará algo. Sería maravilloso romper las barreras que vemos en el camino de un universo de ciencia ficción. Sería emocionante tener una nueva física para explorar. Y sería mucho menos triste si estas personas tuvieran razón de alguna manera. Pero los finales felices como ese también son, por lo general, una fantasía.
