Hay varias formas de medir nuestra velocidad orbital, pero probablemente el método más poderoso es medir el desplazamiento Doppler de las estrellas circundantes. Si observa repetidamente el espectro de un grupo de estrellas (mejor si lo hace a lo largo de la eclíptica) y mide el desplazamiento en sus líneas espectrales, encontrará que todas ellas tienen un componente sinusoidal con un período de exactamente un “año terrestre”. Esto, por supuesto, no se debe al movimiento de las estrellas, sino al movimiento de la Tierra en relación con ellas. De esta amplitud de desplazamiento Doppler puede derivar directamente la velocidad orbital de la Tierra alrededor del Sol.
Así es como se vería el espectro de una estrella:
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Una vez que corrija el ángulo de visión de la estrella desde la eclíptica, encontrará que la velocidad orbital promedio de la Tierra alrededor del Sol es de aproximadamente 30 km / s (108,000 km / h).
Sin embargo, es importante recordar que la Tierra orbita no solo el Sol, sino también el centro de la Vía Láctea, y la propia Vía Láctea se mueve entre sus galaxias vecinas. Entonces, quizás una pregunta aún más interesante, ¿cuál es la velocidad total de la Tierra? Al principio, esto parece una tarea imposible, ya que no hay un punto de referencia “especial” en el Universo desde el cual podamos medir. Sin embargo, sorprendentemente, el fondo cósmico de microondas nos proporciona una referencia absoluta de velocidad.
En 1965, se descubrió que el Universo está impregnado por la radiación de microondas que queda del período de recombinación (que ocurrió aproximadamente 300,000 años después del Big Bang). Esta radiación, ahora llamada Fondo Cósmico de Microondas o CMB, tiene una temperatura extremadamente uniforme de 2.725 Kelvin. Pero tiene un gradiente suave en su temperatura a través del cielo, desde 0.0035 Kelvin por debajo del promedio en la dirección de la constelación de Acuario, hasta 0.0035 Kelvin por encima del promedio en la dirección de la constelación de Leo. Rápidamente se dio cuenta de que este dipolo era exactamente la velocidad total de la Tierra que estábamos buscando, y llega a unos 600 km / s con respecto a la radiación CMB. Ahora se sabe que gran parte de esta velocidad se debe al movimiento de nuestro Grupo Local de galaxias hacia el Gran Atractor.
[Nota: tomado del dipolo de fondo de microondas cósmico]