La misteriosa energía oscura que impulsa la expansión acelerada del universo puede tener sus raíces en la “energía de vacío” de fondo que impregna todo el cosmos, sugiere un nuevo estudio.
“Lo que creemos que está sucediendo es un efecto dinámico del vacío cuántico, un parámetro que podemos calcular”, dijo en un comunicado la coautora Joan Sola, de la Universidad de Barcelona en España. “Nada está más ‘lleno’ que el vacío cuántico, ya que está lleno de fluctuaciones que contribuyen fundamentalmente a los valores que observamos y medimos.
Aunque la energía oscura constituye aproximadamente el 75 por ciento del universo, los científicos no saben exactamente qué es. Han desarrollado varias ideas diferentes, incluida la teoría de la “quintaesencia”, que propone una especie de agente antigravitatorio que repele en lugar de atraer.
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Otro concepto plantea la existencia de un “campo fantasma” cuya densidad continúa aumentando con el tiempo. Esta teoría predice una expansión acelerada tan poderosa que eventualmente romperá los enlaces que mantienen unidos a los átomos, destrozando el universo en un “Big Rip” dentro de unos 20 mil millones de años a partir de ahora.
Las hipótesis de la quintaesencia y el campo fantasma se basan en parte en los datos recopilados por la sonda de anisotropía de microondas Wilkinson de la NASA (WMAP) y el satélite Planck de la Agencia Espacial Europea, una nave espacial que ha estudiado el fondo cósmico de microondas, la antigua luz que comenzó a saturar el universo 380,000 años después de la Big Bang.
En el nuevo estudio, Sola y el autor principal Spyros Basilakos de la Academia de Atenas en Grecia analizan las mismas observaciones de naves espaciales y encuentran menos apoyo para la quintaesencia o la idea del campo fantasma.
“Nuestro estudio teórico demuestra que la ecuación del estado de la energía oscura puede simular un campo de quintaesencia, o incluso un campo fantasma, sin ser uno en realidad”, dijo Sola. “Por lo tanto, cuando vemos estos efectos en las observaciones de WMAP, Planck y otros instrumentos, lo que estamos viendo es un espejismo”.
Basilakos y Sola en cambio sugieren que la energía oscura es un tipo de energía dinámica de vacío cuántico, algo diferente de la constante cosmológica de Einstein, que describe una densidad de energía de vacío estática y es otra posible explicación de la naturaleza de la energía oscura.
Basilakos y Sola reconocen que hay algunos problemas con la teoría de la energía del vacío cuántico, pero dicen que es una idea prometedora.
“Sin embargo, los campos de quintaesencia y fantasma son aún más problemáticos; por lo tanto, la explicación basada en el vacío cuántico dinámico podría ser la más simple y natural”, dijo Sola.
